Ingredientes:
- Láminas de hojaldre
- Sal
- Aceite de oliva
- Huevo batido para pincelar
- 1 cebolla
- 1/2 pimiento
- Champiñones
- Calabacín
- Berenjena
- Ramitas de brécol
- Cebolla
- Tomate minis o 1 tomate grande
- Espárragos en conserva
- Berenjena
- Queso a gusto
Preparación:
La primera parte de los ingredientes siempre son los mismos, hojaldre del que venden en los súper, preferiblemente fresco, y los mejores desde mi punto de vista, los de Mercadona o Lidl.
Desenrollamos el hojaldre y lo colocamos encima de la bandeja de horno, sobre el papel de hornear en el que viene.
Colocaremos las verduras siempre dejando un borde alrededor, sea la masa cuadrada, o redonda y que pincelaremos con huevo batido para que nos quede de un precioso color dorado.
Las verduras, podréis elegir a gusto siempre, yo os dejo unos ejemplos pero podréis adaptarlas a gusto.
Para la primera opción solo es cortar o laminar las verduras finitas, y saltearlas unos minutos con un chorrito de aceite, si usamos berenjena, previamente la sazonaremos con sal y dejaremos macerar diez minutos para quitar el exceso de acidez.
Una vez salteadas las verduras y sazonamos de sal, dejamos enfriar un rato y una vez tibio, colocamos encima del hojaldre, como ya avisé dejando un borde alrededor.
Ahora si, pincelamos con huevo batido el borde que hemos dejado y metemos en la horno previamnete caliente a 200º.
Dejamos hasta que el hojaldre esté dorado a nuestro gusto.
Para la segunda opción también utilicé un poco de brécol que me había sobrado, por eso esta receta es de aprovechamiento, verduras que te sobran de la comida del mediodía, un poco de col, grelos, unas coles, las salteamos con un poquito de aceite, en mi caso con cebolla y pimiento, que para mi es la base favorita y para encima del hojaldre, y bueno si le ponemos un poquito de queso encima, de cabra, parmesano, de tetilla,o incluso un azúl, entonces le daremos un toque, que no os podréis imaginar.
Una vez hecha, sacamos y disfrutamos.
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