Desde que he descubierto que en la panificadora se puede hacer el arroz con leche gracias al blog Kanela y Limón, es tan cómodo y sale tan bien que ya cae casi todos los fines de semana, os tengo unas cuantas versiones distintas de arroz con leche por enseñar.
De momento hoy, la forma tradicional, y también puedes ver el arroz con leche con turrón jijona que he hecho en navidad pinchando aquí: http://alyscakes.blogspot.com.es/2017/12/arroz-con-leche-y-turron-en-panificadora.html
Puedes ver el modo tradicional, sin panificadora aquí: http://alyscakes.blogspot.com.es/2017/02/arroz-con-leche-super-cremoso.html
Ingredientes:
- 1 litro de leche
- Corteza de lima o limón
- Rama de canela
- 150 gr de arroz redondo, uno bueno.*
- 50 gr de mantequilla
- 100 gr de azúcar
- Canela en polvo a gusto
- Evidentemente la panificadora, yo tengo la del Lidl
*Nota: En la receta de Kanela y Limón usa 175 gr, a mi me resulta espeso, así que añado 150 gr y me gusta mucho mas, ahora cada cual a su gusto.
Preparación:
Una vez empiece a hervir, retiramos del fuego.
En la cubeta de la panificadora colocamos el arroz, y encima la leche, sin la rama de canela y la corteza de limón.
Seleccionamos el programa 11, para mermeladas, con duración de 1:20
Cuando falte 30 minutos para terminar el programa, añadimos el azúcar y la mantequilla en daditos pequeños.
Una vez finalizado, retiramos el arroz de la cubeta y lo colocamos en el bol a servir tapado con papel de aluminio, o film transparente para que no coja costra.
Una vez tibio guardamos en la nevera.
Espolvoreamos con un poquito de canela en polvo y servimos para disfrutar.
Hola de nuevo guapa
ResponderEliminarEl arroz con leche es el postre que siempre elijo cuando como fuera de casa, en algún local donde sirven el menú del día, porque sé que a mal que esté, me va a gustar.
De pequeña no me entusiasmaba, pero ahora es de mis preferidos.
Yo nunca lo hago en la panificadora, y eso que la tengo, pero seguro que está igual de rico y te ahorras el estar removiendo a cada rato.
Te cuento una cosa pero no se digas a nadie: resulta que cuando compro una maquinita nueva, nunca tiro la caja, cuando termino de usar el cachivache en cuestión, lo lavo y lo seco muy concienzudamente, tras lo cual lo devuelvo a la caja, y esta la guardo en el armario, a veces incluso en una posición concreta, y siempre en el mismo sitio. Como tengo tantos cachivaches, suele ocurrir que para sacar una caja, tengo que sacar primero otras que están delante, y claro, me da más trabajo hacer todo eso que preparar la receta como se hizo toda la vida. Soy masoca y no puedo evitarlo, jeje...
Besos guapa